El proceso de divorcio no termina con la firma de la sentencia, ya que ambas partes tienen la obligación de cumplir con lo estipulado en ella. Desafortunadamente, en algunos casos una de las partes no cumple con lo acordado, lo que puede dar lugar a una situación muy complicada. El incumplimiento de una sentencia de divorcio se produce cuando una de las partes no cumple con lo establecido en la sentencia. Por ejemplo, si la sentencia establece que una de las partes debe pagar una pensión alimenticia, pero no lo hace, o si la sentencia establece un régimen de visitas, pero una de las partes no permite el acceso al hijo común al otro progenitor.

En caso de incumplimiento de la sentencia de divorcio, la parte afectada puede presentar una demanda de ejecución de sentencia ante el juez encargado del caso. La ejecución consiste en obligar a la parte incumplidora a cumplir con lo establecido en la sentencia. Para ello, el juez puede imponer sanciones económicas, embargar bienes o incluso ordenar el ingreso en prisión de la parte incumplidora.

Si a pesar de la ejecución de la sentencia de divorcio, la parte incumplidora sigue sin cumplir con lo establecido en la sentencia, se puede presentar una demanda de modificación de medidas. Esta demanda tiene como objetivo modificar la sentencia de divorcio para adaptarla a la nueva situación.

Las actuaciones judiciales que hay que afrontar en estos casos requieren de la asistencia de procurador y abogado. Contar con la ayuda de un abogado de familia es fundamental para resolver el conflicto, así como también es importante su papel negociador que promueva una solución amistosa , evitando un procedimiento más problemático. Si necesitas asesoría sobre éste o cualquier otro asunto legal, no dude en acudir a Alonso y Asociados. Contacte con nosotros.