Los planes de pensiones son considerados por muchas personas como un complemento para mejorar sus ingresos durante la jubilación. Estos activos pueden heredarse, pero es importante tener en cuenta las implicaciones que su transmisión a los herederos conlleva.

Un plan de pensiones es un instrumento de ahorro a largo plazo diseñado para proporcionar ingresos durante la jubilación. A lo largo de su vida laboral, el titular realiza aportaciones periódicas al plan de pensiones, que son invertidas en diferentes activos financieros como acciones, bonos y fondos de inversión.

Un plan de pensiones genera beneficios económicos basados en las aportaciones realizadas por el titular y el rendimiento del plan. Cuando el titular fallece, tanto las aportaciones como los rendimientos se convierten en derechos económicos.

Si el titular designó un beneficiario para el plan de pensiones, los derechos económicos corresponden a esa persona o personas designadas. Incluso si hay varios beneficiarios, el titular puede determinar el porcentaje que corresponde a cada uno.

Las cantidades que los herederos reciben de un plan de pensiones no están sujetas al Impuesto de Sucesiones. Sin embargo, los beneficiarios deben declarar en el IRPF el importe recibido como rendimiento del trabajo, ya sea en forma de capital o renta.

Si has heredado un plan de pensiones, debes seguir ciertos pasos y completar trámites específicos para recibirlo. Cada situación es única, y cada heredero o beneficiario tiene circunstancias personales distintas. Si necesitas ayuda, no dudes en contactar con Alonso y Asociados. Somos un equipo multidisciplinar, especialistas en Derecho Patrimonial.