En un post anterior os hablamos de la pensión alimenticia. Hoy os queremos explicar con detalle qué tipo de gastos se incluyen en la pensión, ordinarios y extraordinarios, y cómo reclamarlos.

Los gastos ordinarios son los gastos previsibles, periódicos e indispensables para atender las necesidades primarias de los hijos: la alimentación, la vivienda (agua, luz y gas), la ropa, los cuidados médicos y la formación académica. Si la custodia corresponde a uno de los progenitores, recibirá dicha cantidad del otro progenitor. En caso de custodia compartida, normalmente cada uno contribuye al gasto a partes iguales.

Los gastos extraordinarios son imprevistos para los que no se puede establecer una cantidad en la pensión. Pueden ser necesarios (actividades extraescolares, clases de refuerzo o academias, tratamientos médicos no incluídos en la Seguridad Social) o no necesarios (actividades extraescolares, viajes de estudios, celebraciones, etc.). En ambos casos, los progenitores tienen que estar de acuerdo en su realización y abonar el 50% del gasto.

¿Qué ocurre si se produce un impago de la pensión o de algún gasto extraordinario? La primera opción siempre es hablar y negociar. Puede que el impago se deba a una precaria situación económica con lo que un procedimiento judicial tendría poco efecto. Se puede llegar a un acuerdo privado a la espera de que la situación mejore. Si esto no funciona, tendrá lugar un procedimiento ejecutivo para la reclamación de alimentos. En el caso de los gastos extraordinarios, el Tribunal decidirá si es o no reclamable antes de reclamarlo, para después plantear la ejecución.

En cualquier caso, estas reclamaciones no son procesos fáciles. Sin duda necesitará del asesoramiento de un profesional especialista en este tipo de casos. En Alonso y Asociados lo somos. No dude en contactar con nosotros. Le acompañaremos a lo largo de todo el proceso.